Poner límites a los niños a veces puede parecer agotador, difícil, complejo. Cada situación cotidiana puede convertirse en una misión difícil de llevar a cabo cuando los límites están ausentes. Los límites son necesarios para vivir en sociedad. Sin ellos, sería un caos la vida. El límite debe ser claro. Acompañar a los niños con paciencia, es acompañarlos con inteligencia. No debemos olvidar que la “paciencia” es saber esperar. En los más pequeños, la curiosidad es una característica propia. Cada etapa en la vida del niño, conlleva distintos tipos de límites. Desde muy pequeños, los niños están regidos por el “principio del placer”. Muchas veces, el llanto es considerado como un reflejo del niño que se porta mal. Pero es importante saber que el llanto equivale a las palabras que aún no pueden decirnos. Ese impulso es la herramienta que ellos tienen para hacerse entender. Aprender a compartir, a esperar, es una maduración que, con el tiempo y su desarrollo emocional, logrará a l...
Soy Adriana, estudiante del Profesorado de Nivel Inicial. Soy, además, Licenciada en Diseño Gráfico. Me gusta compartir experiencias relacionadas con el arte, la ilustración y la imaginación fusionadas con la educación.